te leo, y entre lineas solo encuentro misterios,
encuentro una incógnita nueva en cada una de tus letras,
un alfabeto nuevo creado a partir de cada luz en tu mirada.
Intento adivinar el destino que tendrán tus ojos
solo encuentro sombrías imagenes de un futuro sin pasado,
de una historia no contada, con personajes inventados.
Trato entonces de escribirnos una historia,
de aprender tu lenguaje de miradas seductoras,
de ser parte del mordisco a tus labios encendidos.
Logro solo envolverme en tu vida de ilusión,
de personas y sueños que se hacen de cartón.
Me resigno a crearte y no creerte,
a inventarte en mis latidos.
Trato entonces de escribirnos una historia,
de aprender tu lenguaje de miradas seductoras,
de ser parte del mordisco a tus labios encendidos.
Logro solo envolverme en tu vida de ilusión,
de personas y sueños que se hacen de cartón.
Me resigno a crearte y no creerte,
a inventarte en mis latidos.
Orquídea